Reflexiones de mi Abuela

22 de enero de 1984.

Reconciliarse…

Quiero que comprendáis qué es para mí reconciliación… Es sentarse frente a frente con el hermano y llorar juntos por la causa que nos ha separado, por el antiguo rencor.

Este rencor es el que nos ha dividido, pero es el rencor que seguimos alimentando día tras día como si en el fondo nos encantara. Este es el año de la reconciliación. ¿Por qué sigue existiendo entre nosotros tanto veneno que lleva a muchos a la locura, al ansia de matar?

¿Cómo es posible perdonar en un mundo así? ¿Cómo es posible perdonar al que ha disparado contra ti? ¿Solamente porque el Dios de nuestra religión así lo ordena?

El Papa Juan Pablo frente a Ali Agca. ¿Podemos imaginar las palabras que el Papa dijo a su asesino? Sin duda fueron palabras de perdón, de misericordia, de comprensión.

Estas viejas palabras, tan propias del cristiano, tendrían un sentido nuevo al ser pronunciadas en la celda de una cárcel a media voz, dirigidas a un creyente del Islam.

Yo vi la foto que ha recorrido el mundo entero, igual que vosotros. ¿Qué sentisteis al verla? ¿emoción? ¿ternura? ¿arrepentimiento? Es hora de volver los ojos a nuestro hermano y dejar de disparamos por nada los unos a los otros. Es el camino para lograr que el alma no se nos pudra por la enfermedad que provoca el rencor.C.84